Cuando pienso en mis pequeños hijos o simplemente los veo jugar, siento felicidad.
Me alegra saber que estamos en una iglesia que recomienda la participacion de la familia en diversas actividades incluso destinar un dia de la semana especial para jugar, aprender, comer algo rico y estrechar los lazos.
Como vivimos esta enseñanza hace mucho, los juegos tradicionales como la gallinita ciega,la escondida etc, los hemos jugado en innumerables ocaciones, asi que la semana pasada decidimos invertir en juegos que podamos conservar. Twister fue la compra de la semana anterior en nuestra noche de hogar y para mañana tenemos " yenga".
Diversion!!
Twister... un juego para retorcerse.
